Hoy, el gobierno pp-fascista valenciano, en un intento de desviar la atención por el levantamiento del secreto sumarial del caso Gürtel, ha enviado las máquinas para derribar las viviendas del barrio del Cabanyal, también a la policía para cargar contra los vecinos que estaban allí abrazando el barrio para evitar la Barberitat.
Aquí algunas imágenes de la saña que ha empleado la policía y de la valentía de vecinos y políticos.
Siempre es igual.
Cuando no hay razones queda sólo la fuerza.
Besos.