• Compromís per Paiporta exige a Font de Mora la inmediata construcción del CP6 y del nuevo Lluís Vives, así como la adecuación del IES la Sènia y del Colegio l’Horta.

Compromís per Paiporta ha mostrado su solidaridad con los representantes de las AMPAS, centros escolares y, sobre todo, con el alumnado del municipio que a día de hoy sigue sin tener instalaciones adecuadas y dignas donde recibir una educación de calidad.

Desde el grupo Compromís lamentan “la dejadez de la Consellería de Educación que tiene abandonados los centros escolares del municipio y no ha comenzado todavía la construcción de los nuevos colegios CP6 y Lluís Vives (junto al parque la Florida)”. También desde el grupo se lamentan de “la poca capacidad del gobierno municipal para conseguir que se cumplan las fechas acordadas por parte de Consellería para poner en marcha dichos proyectos (ambos debían haber comenzado en 2009)”.

“La construcción del CP6 y del nuevo Lluís Vives ya debería estar en marcha, por lo que este nuevo retraso supondrá que los alumnos deban continuar más tiempo en barracones y en un colegio provisional situado en otro municipio”, ha explicado la concejal del grupo Isabel Martín, y añade “de momento no vemos ninguna diferencia con el anterior equipo de gobierno”.

También desde Compromís aplauden la iniciativa de los alumnos y alumnas del IES la Sènia de llevar ante la propia Consellería sus reivindicaciones “es gratificante ver a jóvenes que se movilizan para exigir centros dignos donde poder estudiar, por ello saben que tienen todo nuestro apoyo”. Y es que según explican “el IES la Sènia está en unas condiciones pésimas debido a la saturación que siempre ha sufrido y el abandono al cual le tiene sumido la Consellería. Ya no es únicamente que la calefacción no funcione o que no haya sitio físico para desarrollar algunas actividades, cosas que ya nos parecen inaceptables, es que hemos llegado a ver techos desplomarse y ventanas que por poco causan un grave accidente al caer encima de los alumnos en plena clase, ¿qué más tiene que ocurrir?”, ha manifestado Martín.

Respecto al acoso que por parte de la Consellería de Educación se está ejerciendo sobre la dirección del CP6 -hace unos días enviaron a una inspectora de zona para intentar obligar al centro a retirar la pancarta colocada en el viejo edificio que reivindica el nuevo centro escolar- desde Compromís lamentan la actitud amenazante de Consellería y esperan que detrás de esto no haya ningún tipo de coacción “la pancarta no tiene ningún mensaje insultante, simplemente refleja una realidad y es que continúan pasando los días y siguen sin comenzarse las obras del nuevo centro”. Martín también ha lamentado que en su día desde el Ayuntamiento retiraran la pancarta, coartando así la libertad de expresión de los representantes del centro escolar que la habían colocado “si en Consellería molesta el mensaje no tienen más que comenzar las obras del nuevo centro, así la pancarta podrá ser retirada”, ha expresado la concejal del grupo.


Salmonelosis en el colegio Jaume I

Compromís ha denunciado también que desde el Ayuntamiento se ha ocultado información de los casos de salmonelosis que ha habido en el colegio Jaume I de Paiporta, ya que en la comisión de Bienestar Social la concejal delegada de Salud Pública informó de que el número de alumnos afectados de la enfermedad había quedado en 9 cuando en realidad ha sido una veintena el número de niños afectados, de los cuales incluso 17 necesitaron hospitalización. “El 21 de enero el concejal de educación nos confirmó que habían sido únicamente ocho los alumnos afectados y que además el caso estaba cerrado y bajo control, pero un mes más tarde los casos se han duplicado, por lo que nos preguntamos si es que como siempre nos siguen ocultando información, o lo que sería mucho más grave, que el caso no estuviera controlado tal y como aseguraron”, ha añadido Martín.

Paiporta 17 de febrero del 2010
Compromís Paiporta
Bloc – Projecte Obert


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• Luis Ródenas ha subvencionado de manera extraordinaria con casi 10.000€ a la Banda Primitiva de Paiporta al margen del convenio del Ayuntamiento con las entidades musicales del municipio.

Compromís per Paiporta ha denunciado que el concejal de cultura Luis Ródenas ha subvencionado de manera directa y con casi 10.000 euros a la entidad musical “Banda Primitiva de Paiporta”, de la cual el edil popular es también presidente.

Compromís ha revelado que las subvenciones fueron otorgadas a dicha entidad por decreto y sin dar cuenta en la comisión informativa de cultura entre los meses de noviembre y diciembre del pasado año. También, y tal y como adelantó el grupo en el último pleno, en el mes de diciembre se aprobó por decreto otra subvención directa de 3.000€ a la “Escuela de Música Francisco Llorens”, escuela de música de la propia Banda Primitiva de Paiporta.

Con todo ello las subvenciones suman un total de 9.400€. Estas subvenciones se añaden además a la subvención de 12.000€ que por convenio reciben las entidades musicales para el desarrollo de sus actividades anuales y por la colaboración que prestan en diferentes actos municipales.
Para Compromís el problema no radica en el dinero que se ha dado a la entidad musical sino por la manera en que se ha hecho, por decreto y sin dar cuenta al resto de concejales, ya que desde este grupo siempre han criticado el poco apoyo que se da a las entidades culturales “áreas como cultura son las que siempre sufren recortes presupuestarios y son muchas veces las asociaciones culturales las que llenan de actividad la programación municipal, por lo que toda ayuda que reciban es poca”, han explicado. Desde el mismo grupo lamentan además que las subvenciones se otorguen de manera directa dependiendo de los “lazos” que el equipo de gobierno tenga con la entidad “esto es un agravio para el resto de asociaciones”, ha añadido la concejal del grupo municipal Isabel Martín.

Para Martín, “esta actuación de Ródenas es una más en la serie de irregularidades de este concejal”. Cabe recordar que hace unos días se dio a conocer que la mujer de Ródenas había sido una de las seleccionadas en los talleres de empleo municipales.

Martín preguntó en el último pleno por una de las subvenciones al concejal de cultura, pero éste se negó a contestar en ese momento “Ródenas no quiso dar ninguna explicación al respecto, lo que evidencia que su actuación no es del todo correcta”, ha manifestado la concejal de Compromís.

En ese mismo pleno el concejal de cultura fue también protagonista de otros momentos calientes. El primero de ellos fue cuando se trató la moción presentada conjuntamente por Compromís y PSPV en la que se pedía la dimisión del edil por haber insultado gravemente a los miembros de la asociación de víctimas del metro 3J al calificarles de “ser cuatro indocumentados”. El segundo momento tenso de la sesión se dio cuando tuvo que contestar a otra pregunta sobre la colocación de su mujer en un taller de empleo del Ayuntamiento. Ambos requerimientos fueron esquivados por el concejal, ya que la moción no pudo tratarse al desestimarse con el voto en contra del PP. Respecto a la colocación de su mujer en el taller de auxiliar de geriatría, la concejal de Fomento económico y empleo justificó su elección por “tener el perfil idóneo para la plaza”. Hay que añadir que el taller de empleo está formado tan solo por una treintena de desempleados mientras que la cifra de parados en el municipio asciende a 2.600.

Para Compromís el comportamiento del edil es inmoral y raya la legalidad, por lo que vuelven a solicitar su dimisión inmediata “Paiporta no merece concejales como Ródenas y por el bien de la democracia y la transparencia debería dejar su cargo inmediatamente”

Paiporta 14 de febrero del 2010
Compromís Paiporta
Bloc – Projecte Obert



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Vicente Ibor haciendo uso de medios municipales y en respuesta, cual pataleta de chiquillo de primaria, a la labor de oposición de nuestro grupo municipal ha enviado un comunicado de prensa en el que me acusa de "haber llamado mendigos a las personas necesitadas de Paiporta".
Quienes siguen nuestro trabajo día a día saben que ese no es nuestro talante (el PP en cambio si descalifica continuamente a los ciudadanos de Paiporta, todo el mundo ha podido verlo en boca de Ródenas), muy al contrario peleamos día a día porque haya una digna política municipal y se pongan en marcha planes de empleo.
en fin.....ladran Sancho, señal de que cabalgamos.

Martín pide a Ibor que ponga en marcha políticas de empleo efectivas y se deje de chismorreos “de patio de colegio”

Compromís per Paiporta ha calificado de “malintencionada” y sacada de contexto la acusación de Ibor hacia la concejal del grupo municipal, Isabel Martín, al afirmar que esta había llamado “mendigos” a las personas necesitadas de Paiporta.

Desde Compromís explican que en el pleno del mes de enero, cuando se debatían los presupuestos municipales, la concejal Martín explicó el voto en contra hacia los mismos por carecer estos de políticas de empleo y ser poco sociales, y así acusaba al equipo del PP de “ser ellos los que tratan de mendigos a los ciudadanos y ciudadanas que deben solicitar ayudas a las necesidades básicas por su situación desfavorecida”.

Compromís ha planteado diferentes propuestas y alternativas para que los ciudadanos puedan pasar estos momentos difíciles, pero desde el equipo de gobierno prefieren continuar con la política de ayudas puntuales (las cuales rondan los 300€ por unidad familiar) y los recortes en servicios sociales (un 3,34% menos que en 2009). Así desde Compromís exigen que “se pongan en marcha inmediatamente políticas de empleo dignas para que los ciudadanos no deban llegar a situaciones límite.”

Además para Martín es intolerable que la concejal de bienestar social y la concejal de fomento de empleo ganen 21.280€ anuales cada una cuando hay más de 2.800 desempleados en el municipio que difícilmente llegan a fin de mes”. Y añade “es también indignante que la mujer del concejal de cultura sea una de las agraciadas para participar en uno de los talleres de empleo del municipio, cuando su marido es también liberado en el Ayuntamiento”. Respecto al tema de las retribuciones del equipo de gobierno, Martín presentó una enmienda para reducir en un 15% los sueldos de los concejales y grupos municipales y dedicar estos 50.636,96€ a los más necesitados, pero “lamentablemente el PP votó en contra de rebajarse los sueldos”.

Para Martín el comunicado de Ibor responde a una pataleta típica de patio de colegio, motivada por la labor de oposición llevada a cabo por el Grupo Compromís “está claro que estamos haciendo un buen trabajo como oposición, pues la única repuesta que saben dar es el ataque personal hacia mi persona”, ha apuntado la concejal, y lamenta “que Ibor pierda el tiempo en estas deleznables actitudes en lugar de trabajar por sus ciudadanos”.

Por otro lado, el grupo estudiará emprender medidas legales por hacer uso de medios municipales, como es el gabinete de prensa, por parte del equipo de gobierno para usos partidistas y malinterpretar las palabras de la oposición, “al más puro estilo goebbeliano”.

Paiporta 10 de febrero del 2010
Compromís Paiporta
Bloc – Projecte Obert


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Era dilluns i devia caminar cansada. Feia dies que no dormia bé. Potser eren coses de l’edat o dels estudis o d’aquella feina a mitja jornada al súper que tant odiava, però el cas és que sempre que arribava a casa llençava la motxilla, dinava i es tancava a l’habitació. Escoltava una música infernal, com el soroll d’una rentadora, amb unes veus que xisclaven i et colpejaven el cor. No cal dir que aquell dia també la devia escoltar. I us la podeu imaginar caminant amb els auriculars blancs incrustats a les orelles com si foren part d’ella. Deia que aquelles cançons la relaxaven. Que l’aïllaven. Que la transportaven no sé on. Sa mare no ho entenia. No l'entenia. Es passava el dia repetint-li allò que es tallara els cabells, que s’arreglara un poc, que es deixara estar de forats a la llengua i l’orella. No saps què fas ni què vols! Però qui et penses que ets? No se l'escoltava. Ella tampoc se l'escoltava massa. Però una mica sí. M’agradaria creure que havia acabat el batxillerat per la insistència d'aquella mare que feia de pare i de germana i d'àvia i de tot un poc. I tinc l’esperança de pensar que potser, amb els anys, hauria acabat de comprendre com de sola i cansada se sentia en aquell pis de parets grogues de la perifèria de les perifèries. Allà on aquell dia tornava.

Era gairebé migdia i la fam se li devia obrir com un polp remenant-se dins l’univers estrany que era el seu cos. Ni prima ni grossa. Ni alta ni baixa. Ni guapa ni lletja. Però fràgil. Ho devia pensar cada dia quan acabava de raspallar-se les dents davant l’espill. Bé, potser només ho devia pensar un moment. Perquè ella no feia gaire cas a aquestes coses del físic. Ni en el físic ni en res del que ella anomenava ‘cànons establerts’. Ella creia en el dia a dia. En l’avui. En l’ara. I en aquell ‘ara’ tenia fam. I per això probablement va accelerar el ritme entre l'aldarull de cotxes sorollosos i semàfors verds i rojos que la van conduir fins allà on tots sabem.

El metro li semblava com un món subterrani amb vida pròpia. Li agradava aquell aire decadent de rajoles engroguides i cartells greixosos. Pensava que era com enterrar-se al lloc on cadascú es mostra com és. Un zoo d’olors i colors, deia. I potser per això tenia la curiosa mania d’analitzar la gent amb què es creuava. Ulleres de pasta, camises, tatuatges, corbates, pèls de punta, arracades de perla. I de la rutina en feia un espectacle. Fins que arribava, és clar, el moment del cabreig. O sia, de pagar. Perquè em jugue el que vulgueu que la targeta no li va funcionar a la primera. Potser perquè se li havia arrugat o perquè la màquina estava espatllada o vés a saber per quin altre motiu, però supose que va acabar fent cua a la finestreta i que la va atendre un empleat d’aquells que ja han nascut amb cara fatigada però comprensiva. I tal volta hi havia cartells de vaga. I segurament eren cartells que demanaven millores. Que les exigien. Però ella no els degué veure perquè el cabreig la devia cegar mentre repetia la rutina. Un senzill. Ací tens. Gràcies. Gràcies. Adéu. Adéu.

Aquell dilluns era hora punta i l’andana devia estar plena de gent. I segur que ella va intentar fer-se un lloc allà on fóra menys visible. És estrany intentar trobar el teu territori entre la multitud sense perdre de vista el fossar fosc i brut. Però ella el buscava. I potser el va trobar en forma de banc lliure en una de les puntes de l'andana. Allí degué fer un altre recompte. Polos verds, bosses de plàstic, maletins, laca, samarretes negres, tacons. I més olors i colors. Al costat, qui sap, un xic també amb auriculars. Què deu escoltar aquest? Ja us he dit que li agradava fantasiejar, saber com era la gent segons les pintes, les expressions, la manera de caminar o de parlar. Fins i tot, de vegades també escoltava les converses. Baixava el volum de l’mp3, parava l’orella i remenava les vides alienes per matar l'avorriment.

Però aleshores una remor la degué enganyar. Perquè potser va creure que el seu tren s’acostava quan en realitat era el d’enfront. No us pensareu que va agafar el metro tan ràpidament! Per descomptat que es degué esperar. Primer dos minutets. Després altres dos. I encara uns altres dos. I el xic del costat devia continuar escoltant la mateixa música i ella devia continuar intentant endevinar què estudiava. O potser treballava? I deurien passar dos minutets més. I dos més. I dos més. Fins que degué arribar la remor definitiva. I segur que ho va fer acompanyada d’aquell soroll de maquinària antiga, com si el vagó fóra una d’aquelles carretes que s'accionaven a mà a les pel·lícules de l'Oest. I probablement el comboi es va aturar i va obrir les portes amb el típic estufit i totes les cares de l'andana van dissimular mentre prenien posicions per pujar-hi de pressa i corrents. Com ho va fer ella.

Dins el metro tot devia tremolar. I la gent es devia agafar a les barres. Alguns potser llegien fent equilibris mentre d’altres es creuaven les mirades i giraven la vista incòmodes cap als diaris gratuïts que sempre hi ha escampats pels seients buits. Ella no els mirava mai. És possible que n’agafara algun i que se’l llegira per damunt. No ho sé. Però supose que es va cansar aviat i va pujar el volum de la música com esperant que aquella veu cridanera la mantinguera desperta amb l’ajuda de les guitarres infernals que sonaven com si marcaren el ritme d'una fàbrica o què sé jo. No entenc d’aquesta música, però sempre tancava els ulls i es deixava endur pel balanceig mentre arribaven més estacions i més cares que entraven i eixien i més olors i més colors. Però ella ja no els devia fer cas perquè ja sabeu que era migdia i que devia estar famolenca i devia tenir ganes d'arribar a casa i menjar-se els macarrons que tant li agradaven amb tonyina i tomaca i un pessic de formatge a la cuina on s'asseia al voltant d'una taula plegable, xicoteta, però còmoda.
...
I si m’ho pregunteu us diré que sí, que devia estar preciosa. I que encara me la imagine allí, en aquell vagó, com flotant entre la música que li apujava l'adrenalina amb aquells lletres que no entenia però que ja us he dit que li colpejaven el cor. I la transportaven just allà on voldria ser.
Allà on hauria d’haver estat.
...
I aleshores...
Aleshores va arribar el primer flaix. I després un altre. I un altre. I un altre. Acompanyats de sacsejos i bandades. I potser saltaren espurnes i hi hagueren més flaixos i més crits borrosos i els sorolls aguts de friccions rovellades se li encastaren als timpans. I les bandades devien ser tan violentes que ella degué caure perquè ja us he dit que no era ni prima ni grossa sinó fràgil, massa fràgil com per aguantar aquells sotracs i aquells cops brutals. I segur que de sobte tot es va fer blanc, per un instant, per un instant blanc, molt blanc, i ple de pau, però que de seguida es va fer negre, d’aquell negre tan negre que ofega crits.
I gemecs.
...
Fins que el silenci es va apoderar d'aquell lloc.
...
I del cor de la meua filla.

I la veu s’acaba de trencar i el megàfon s’apaga i la plaça és un aplaudiment emocionat entre pancartes que recorden històries per denunciar oblits.
Com cada dia tres de cada mes.

Conte de Xavi Sarrià llegit per ell mateix el 3 de febrer a la plaça la Verge de València, on com cada 3 de mes familiars i amics de les víctimes de l'accident de metro de València es reuneixen per recordar-los i demanar responsabilitats i millores en la línia.


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